Los secaderos son unidades frigoríficas para recintos que pretenden emular la condiciones climáticas de secado y maduración de alimentos tradicionales, mediante unos procesos naturales de secado, curado, estufaje y maduración de jamones y embutidos, pudiendo cubrir un muy amplia gama de potencias.
El producto, tras su recogida, preparado o finalización se “estaciona” en una sala aislada (cámara con panel sándwich) en la que mediante equipos frigoríficos específicos se realiza el proceso de secado mediante una hábil y precisa modificación de las condiciones climáticas en su interior. Se controlan parámetros como la temperatura, la humedad relativa necesaria, o recreación de corrientes de aire, que terminan en un nivel de maduración de producto, determinada. Estos procesos se pueden realizar en uno o varios ciclos según las necesidades de cada producto a secar.